Este proyecto tiene como objetivo recoger el testimonio oral de hombres y mujeres que trabajaron y vivieron por y para las fábricas de metales de Riópar y que constituyen la memoria obrera que ilumina y permite recuperar la historia contada por sus protagonistas.
El Archivo de la Palabra del IEA en colaboración con la Facultad de Relaciones Laborales de la UCLM y la Asociación de Amigos de las Reales Fábricas de Riópar, ha iniciado este proyecto con una ayuda del Ministerio de Cultura y Deporte para la “Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial” del ejercicio 2020.
En 1773 una Real Fábrica, pionera en experimentación metalúrgica e ingenios hidráulicos en plena Primera Revolución Industrial, da nacimiento al actual pueblo de Riópar, en su origen una colonia obrera. Un ejemplo excepcional de paternalismo industrial que fue declarado Conjunto Histórico en 2010, por su riqueza patrimonial material e inmaterial.
En Riópar se desarrollaba un completo proceso productivo: desde la extracción del mineral en sus minas de zinc, al acabado de piezas artísticas e industriales para el mercado. Los procesos de fundición y mecanizado, sus secretos y artes, se han transmitido de padres a hijos desde entonces.
En este paisaje industrial se fraguó la vida de un pueblo, en el que todo giraba en torno a la fábrica, de la cual dependían todos los servicios que pudiera necesitar una comunidad: el economato, la escuela, el dispensario médico y hasta la iglesia.
Tras el cierre de las fábricas en 1996, las instalaciones de las Fábricas de San Juan de Alcaraz fueron rehabilitadas para albergar un museo, inaugurado en el año 2001, con el objetivo de conservar y difundir su trayectoria de más de dos siglos, ofreciendo un recorrido a lo largo de su historia, así como de los procesos de fabricación de objetos y piezas artísticas de latón y de bronce y también maquinaria de los siglos XIX y XX.
En esta primera fase del proyecto se han grabado, transcrito y editado tres entrevistas, dos de ellas realizadas en las instalaciones de las antiguas fábricas y una tercera grabada en un taller que sigue utilizando las técnicas tradicionales. En una segunda fase está previsto recuperar y digitalizar antiguas grabaciones de hombres y mujeres que trabajaron en las fábricas, así como la realización de nuevas entrevistas a personas que vivieron el proceso final del cierre en los años 90 del S.XX.